Hablar de ofertas comerciales implica hablar de empresas. Muchos negocios se preguntan cómo pueden enviarlas, qué pueden hacer por mejorarlas, cuáles son las técnicas más recomendadas, etc., pero muy pocas se detienen a pensar en su protección. Nos encontramos ante una de las partes más importantes de todo negocio, y es que sin proteger los datos estamos abiertos al apocalipsis de la ciberdelincuencia. Entonces, ¿qué podemos hacer?
Hace dos años, cuando entró en vigor el Reglamento General de Protección de Datos (RGPD), parecía que todo iba a cambiar en las empresas de repente. Han pasado dos años y la aplicación de esta normativa ya se ha llevado a cabo. Sin embargo, el número de compañías que cumplen con todos los requisitos de seguridad ni siquiera alcanza el 20%. Se trata de una realidad en la que aumentan los riesgos, por lo que hoy queremos contarte por qué es necesario proteger el envío de tus ofertas comerciales.
La seguridad es lo primero.
Los datos de una oferta comercial
A priori, todas las empresas saben presentar una oferta comercial, pero ¿dónde queda su protección? Desde luego, se trata de información relevante en la que la manera de contar y presentar siempre cuenta de cara a los clientes. Es por ello por lo que las compañías dedican esfuerzo y tiempo en su creación. En estas solemos explicar una situación al cliente, trasmitimos y mostramos una solución, y le damos un precio.
En definitiva, se trata de una comunicación entre negocios que forma parte de tus activos, precisamente, porque en la misma, normalmente, revelas tu capacidad de trabajo, los alcances que determina tu capacidad y el precio que consideras que vale tu esfuerzo.
Enfocados en las nuevas técnicas
Teniendo en cuenta el constante crecimiento tecnológico, las empresas, a veces, olvidan la parte de la seguridad para enfocarse únicamente en la innovación y el desarrollo. Pese a que ambos son fundamentales en su funcionamiento, la seguridad también debe caminar de la mano. Es por ello por lo que ya podemos hablar de tecnología IRM de cifrado y control de documentos compartidos, requerida por algunas empresas. Estas reciben ofertas de posibles proveedores, precisamente, para proteger el contenido de las ofertas frente a posibles malos usos de una información tan valiosa.
Durante los últimos años hemos visto artículos que atendían a nuevas formas de enviar propuestas comerciales por correo electrónico, tipos de plantillas, consejos para redactar la oferta más atractiva, etc. Se trata de pasos importantes que lograrán mejorar tu comunicación con otras empresas o clientes. Pero, una vez más, volvemos a hacer hincapié en el acompañante de la seguridad. Es así como estarás dando el tratamiento que se merece tu información. ¿De qué sirve crear las mejores ofertas comerciales del mundo si no les otorgas la seguridad que requieren?
Piénsalo por un momento.
Evaluación de la seguridad
Si existe una necesidad clara en las empresas de hoy en día es la de aprender a proteger la información y a tomar las medidas necesarias para mantener la protección y la seguridad de sus clientes. Los hackeos no son la única arma capaz de amenazar tu estructura empresarial, pues encontramos otras situaciones de vulnerabilidad como: el robo o pérdida de dispositivos móviles, la descarga de documentos o software, la apertura de correos electrónicos, el envío de información a la persona equivocada, etc.
¿Cuál es la alternativa que nos queda?
Tomar conciencia de los riesgos y comenzar a actuar. Si quieres evitar los graves problemas que puede ocasionar un incidente de estas características, hoy tienes una oportunidad de oro ante tus ojos. Ya no hablamos únicamente de poner contraseñas en tus dispositivos o de almacenar tus documentos en la nube, sino de dar un paso más allá. Para empezar, es necesario conocer cuáles son los requisitos que establece el RGPD. Te contamos algunos de ellos:
- “A fin de mantener la seguridad y evitar que el tratamiento infrinja lo dispuesto en el presente Reglamento, el responsable o el encargado deben evaluar los riesgos inherentes al tratamiento y aplicar medidas para mitigarlos, como el cifrado”.
- “Deben existir las garantías adecuadas, que podrán incluir el cifrado o la seudonimización”.
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