Los trámites fiscales forman parte de las gestorías. Los encontramos en la tramitación de escrituras y en los impuestos, en los informes de registro, en actos jurídicos, y en un sinfín de documentos.
Las gestorías son los espacios de trabajo encargados de llevar la contabilidad de las empresas. Gestionan sus nóminas, la declaración del IVA, declaraciones de la renta, IRPF, etc., pero los trámites fiscales no son los únicos que se albergan en su actividad, sino que también existen otros que atienden al ámbito laboral, la creación de empresas y las subvenciones, entre otros.
¿Cómo los protegen las gestorías? ¿Son conscientes de su importancia?
Pongamos un caso
Imagina por un momento que alguien acude a tu gestoría porque quiere abrir un negocio. Seguramente te haya ocurrido, ¿no es así? Bien, pues este emprendedor o emprendedora necesita tener un conocimiento específico sobre sus obligaciones fiscales, tal y como las que fueron establecidas por el propio gobierno en España hace ahora 10 años:
- Alta en el Censo mediante declaración censal.
- Inscripción de la empresa en la Seguridad Social.
- Afiliación y alta de los trabajadores.
- Legalización del libro de visitas.
- Alta de Impuesto sobre Actividades Económicas (IAE).
- Alta del empresario en el Régimen especial de Trabajadores Autónomos (RETA).
- Formalización de los contratos de trabajo.
En esta situación, son muchísimos los trámites que debe llevar a cabo la empresa con su gestoría. En ellos se manejan datos de financiación, nombres y apellidos del empresario y sus empleados, y toda una larga lista que debe ser protegida de acuerdo a lo establecido en el Reglamento General de Protección de Datos (RGPD).
¿No crees?
El cifrado de datos en las gestorías
En base a lo que te venimos contando, una de las técnicas más empleadas en la protección de los archivos empresariales viene siendo la del cifrado. Se trata de una técnica basada en la criptografía. Encontramos el cifrado básico con claves simétricas y asimétricas. En definitiva, brinda la seguridad exigida por la normativa vigente y permite evitar fugas de información pertinentes, así como las sanciones impuestas por el RGPD.
En la actualidad, los avances en tecnología han permitido a las empresas usar sus documentos digitales en la nube, en las redes sociales, en el correo electrónico, y en su propio equipo. Eso sí, de la manera más segura posible gracias a técnicas como el cifrado y la tecnología IRM, o Information Rights Management.
¿Dónde estás almacenando tus trámites?
Es posible que en tu consultoría estés trabajando con un alto nivel de información sensible, y puede también que los estés alojando en un lugar poco seguro. Todos los trámites que se gestionan en estos lugares de trabajo son de gran relevancia tanto para el negocio como para el cliente. ¿Te has parado a pensar en lo que ocurriría si de repente sufrieras una fuga de información? ¿Cuántos clientes dejarían de confiar en tus servicios?
Al margen de esta apreciación, gestionar los negocios no es una tarea fácil. Es más, es un largo camino en el que se cruza información de todo tipo: contabilidad, costes, administración, solicitud de subvenciones, certificados de cotización, contrataciones, despidos…
Las gestorías trabajan a diario por ofrecer su mejor servicio a otros profesionales o empresas. Los ciudadanos confían en sus labores, pues han depositado su confianza sobre ellos durante años. Sin duda, trabajan para satisfacer las necesidades de las empresas y ayudarles a funcionar correctamente. Son, incluso, un paso ubicado entre la actividad empresarial y el cumplimiento legal. Proteger los datos de tu gestoría está ahora en tus manos.
¿Estás dispuesto a subir de nivel en el ejercicio de tu negocio?